Fallece Rafa, el bebé cubano que necesitaba un trasplante de hígado

MADRID, España.- Rafael Junior Chávez Carrera, un bebé cubano de ocho meses que padecía insuficiencia hepática terminal, falleció este sábado 29 de junio en el Hospital Pediátrico William Soler de La Habana. La noticia fue confirmada por su familia y activistas que acompañaban el caso desde las redes sociales.

El menor, conocido como Rafa, había sido diagnosticado con hepatitis neonatal idiopática desde su primer mes de vida. La enfermedad derivó en una falla hepática severa y, en sus últimos días, un fallo renal agudo provocado por una infección bacteriana complicó aún más su estado. Médicos del centro hospitalario advirtieron desde el inicio que la única vía para salvarlo era un trasplante de hígado, una operación que no se realiza en Cuba en pacientes pediátricos.

Su madre, Yanet Carrera, era compatible como donante, pero la familia se enfrentó a un callejón sin salida: dentro del país no existía posibilidad de realizar el procedimiento, y fuera, la única opción era tramitar una visa humanitaria para trasladarlo con urgencia a España. El Hospital Universitario La Paz, en Madrid, había mostrado disposición a acoger al menor, como ya hiciera anteriormente con la niña cubana Amanda Lemus, quien sí logró recibir un trasplante exitoso. Sin embargo, la visa solicitada nunca llegó.

Durante las últimas dos semanas, Rafa permaneció hospitalizado en estado crítico. Recibió tratamiento con antibióticos, diuréticos y antitérmicos, en un intento por estabilizarlo. Pese a los esfuerzos médicos y a la campaña pública impulsada por activistas y ciudadanos cubanos dentro y fuera de la isla, el desenlace fue inevitable.

“Su cuerpecito no pudo resistir más, pero su luz, su ternura y su lucha valiente quedarán grabadas en nuestros corazones”, escribió la activista Yamilka Lafita, conocida como Lara Crofs, una de las voces más activas en la denuncia del caso.

El fallecimiento de Rafa ha generado un profundo impacto entre los cubanos, que expresan su indignación por la imposibilidad de acceder a un procedimiento médico básico en otros países y por los obstáculos burocráticos que impidieron actuar con rapidez.

El caso pone en evidencia las profundas carencias del sistema sanitario cubano, tanto en términos de recursos como de capacidad operativa, y la ausencia de protocolos eficaces para gestionar traslados médicos urgentes al extranjero. Una combinación que, en situaciones críticas como esta, conduce a desenlaces trágicos e irreversibles.