Desalojan en Miami a la actriz y activista cubana Ana Luisa Rubio

MIAMI.- La actriz cubana Ana Luisa Rubio, reconocida por su trayectoria en la televisión y la radio de Cuba en los años 70 y 80, ha sido desalojada de su hogar en Miami, según denunció ella misma la semana pasada a través de sus redes sociales. Durante el desalojo, Rubio sufrió un ataque de pánico y denunció que la policía se llevó a sus tres gatos, cuyo paradero aún se desconoce.

Rubio, quien participó en telenovelas, series y programas humorísticos en su juventud, afirmó que desde 2017 ha enfrentado un complicado proceso judicial en el que ha sido acusada injustamente de varios delitos, entre ellos alimentar a animales callejeros.

Tras el desalojo, la actriz ha encontrado refugio temporal en casa de una prima, gracias a la intervención de la también actriz María Karla Rivero Veloz, conocida como Maka y su esposo Jean Michel Fernández. A través de un video en redes sociales, Maka hizo un llamado a la comunidad cubana exiliada en Miami para ayudar a Rubio. “Ana no tiene dónde vivir. Han sido días caóticos para ella, y estamos tratando de encontrar una solución”, expresó.

Maka y su esposo recordaron que, además de su carrera artística, Rubio ha sido una activista destacada en la lucha contra el régimen cubano, lo que la llevó a ser perseguida y agredida en la isla. “Ha sido una mujer muy valiente que enfrentó al régimen con gran determinación. Es momento de que nos unamos y la apoyemos”, señalaron.

Por su parte, Rubio lamentó la desaparición de sus mascotas, asegurando que la policía se las llevó mientras ella se encontraba en estado de crisis. “Mis tres gatos han desaparecido. Nadie sabe dónde están, ni Animal Control ni ninguna otra entidad. Dos de ellos tienen 12 años y uno estaba enfermo. Son mi familia”, expresó con angustia.

Jean Michel Fernández comentó a Cubanet que en la emisión de este martes de la Casa de Maka compartirán más detalles de la situación.

En 2013, CubaNet documentó que Rubio fue víctima de acoso, persecución y violencia debido a su firme postura opositora. En una de las agresiones más severas, un grupo de personas la golpeó brutalmente en la entrada de su domicilio en El Vedado, La Habana, justo frente a una oficina municipal del Partido Comunista de Cuba. A pesar de las lesiones que sufrió en esa ocasión, la policía que llegó al lugar no intervino para protegerla.