Régimen asegura que no ha conversado con la Administración Trump sobre deportaciones

«El Gobierno de Trump aún no ha abordado el tema de la migración, ni ningún posible aumento de las deportaciones con Cuba», reconoció uno de los viceministros de Exteriores del régimen cubano.

MIAMI, Estados Unidos. – Carlos Fernández de Cossío, uno de los viceministros de Relaciones Exteriores del régimen cubano, aseguró a la agencia Reuters que hasta la fecha el Gobierno de Donald Trump no ha planteado a La Habana ninguna discusión formal sobre posibles deportaciones masivas de cubanos previamente admitidos en Estados Unidos bajo programas como el parole humanitario.

“El Gobierno de Trump aún no ha abordado el tema de la migración, ni ningún posible aumento de las deportaciones con Cuba”, declaró Fernández de Cossío. Asimismo, subrayó que “no ha habido ninguna solicitud de esa naturaleza por parte del Gobierno de Estados Unidos”, y aclaró: “Aún no nos hemos sentado a discutir si eso sería una posibilidad”.

Fernández de Cossío recordó que los acuerdos migratorios vigentes entre ambos países datan de la década de 1980, en respuesta a la crisis del Mariel, y explicó que aunque Cuba ha aceptado regularmente deportaciones aéreas y marítimas desde Estados Unidos, la posibilidad de deportaciones masivas de cubanos admitidos previamente no fue contemplada originalmente en esos acuerdos.

“Cuando se firmaron los acuerdos, la posibilidad de que Estados Unidos admitiera y luego denegara la entrada de personas no se consideraba razonable en ese momento. Por lo tanto, cualquier cosa [de ese tipo] tendría que discutirse”, advirtió.

El diplomático también destacó que desde el inicio del segundo mandato de Trump, se han realizado dos vuelos de repatriación hacia La Habana con aproximadamente un centenar de deportados.

Sobre la disposición del Gobierno cubano frente a posibles deportaciones futuras, Fernández de Cossío indicó que la Isla está “abierta” a aceptar devoluciones, “pero siempre dentro de los términos acordados y tomando en cuenta la historia y las circunstancias”.

Fernández de Cossío calificó las posibles deportaciones masivas como “poco realistas e injustas”, al considerar que muchos migrantes cubanos han establecido vidas estables en territorio estadounidense: “Muchos cubanos han construido una vida en Estados Unidos: tienen empleo estable, propiedades y familias. Ahora enfrentan la posibilidad real de ser expulsados debido a su estatus migratorio irregular”. Además, enfatizó: “Es absurdo e irreal que ahora se les amenace con deportaciones masivas cuando fueron invitados implícitamente por Estados Unidos para emigrar”.

En referencia a la relación bilateral en general, el viceministro de Exteriores expresó disposición a “discutir en una posición de respeto” con Estados Unidos y “hablar de todo”, incluyendo las “diferencias” entre ambos gobiernos.

Finalmente, Fernández de Cossío negó categóricamente la existencia de bases militares chinas en territorio cubano y rechazó las acusaciones de presencia militar cubana en Venezuela, pese a investigaciones periodísticas y evidencias que lo contradicen.