¿Quién estuvo detrás de la millonaria renovación de la mansión de Castro en Varadero?

MIAMI.- La Villa Pilar, una de las residencias de descanso más exclusivas del dictador cubano Fidel Castro en Varadero, fue objeto de una costosa remodelación durante la primera década de los años 2000. Al frente de este proceso estuvo Abraham Maciques, figura histórica del entorno empresarial paralelo que sostuvo los privilegios de la élite castrista durante décadas.

Maciques, natural de Matanzas y de ascendencia judía, inició su vínculo con Fidel Castro en 1959, tras desempeñarse como subdelegado de Turismo. Su participación en la defensa del régimen durante la invasión de Bahía de Cochinos consolidó su relación con Castro y Celia Sánchez, lo que le permitió ocupar cargos de gran influencia. Fue presidente de entidades estratégicas como Cubalse, Cubanacán y, especialmente, del Grupo Palco, un conglomerado dedicado a la captación de divisas mediante negocios de turismo, importación y servicios logísticos, operados al margen del control del aparato estatal formal.

Desde 2006, la Villa Pilar estuvo ocupada temporalmente por el artista Alexis Leyva Machado (Kcho), cercano a Castro, y su familia. Durante ese período se emprendió una completa restauración de la propiedad, con Maciques como máximo responsable de la aprobación presupuestaria y la supervisión de las obras, en coordinación directa con la familia del dictador.

Según las fuentes consultadas por Periódico Cubano, el proyecto de remodelación superó los seis millones de dólares, cifra que no incluye el mobiliario ni los equipos de tecnología avanzada adquiridos para la mansión. Entre las inversiones más destacadas figuran cocinas industriales valoradas en más de un millón de dólares, suministradas por la empresa Friusa, estrechamente vinculada al entorno gubernamental. También se modernizaron los sistemas hidrosanitarios, se instalaron vidrios blindados, se rehabilitaron áreas exteriores con terrazas, pérgolas y una piscina térmica, y se incorporaron gimnasios, saunas, salas de masajes y salones de juegos con equipamiento importado desde Estados Unidos.

El proyecto incluyó además la adquisición de maderas preciosas importadas para muebles de comedor, oficinas y áreas de protocolo, así como obras de jardinería de alto valor, sistemas soterrados de redes, antenas y sistemas de seguridad perimetral.

Abraham Maciques estuvo presente en varias de las visitas de inspección realizadas a la Villa Pilar, como consta en imágenes obtenidas de ese proceso por Periodico Cubano y el influencer Darwin Santana. Su intervención fue determinante para garantizar que los trabajos cumplieran con los estándares de lujo exigidos por la familia Castro.

A lo largo de su trayectoria, Maciques fue señalado como administrador de los recursos personales de Fidel Castro y operador de una red de empresas internacionales que facilitaban la importación de bienes exclusivos para la élite gobernante. Sus actividades incluyeron la dirección de compañías registradas en Panamá, Chile y España, gestionadas en parte por su hijo, Alfredo Maciques.

Aunque su poder disminuyó tras el avance del conglomerado militar GAESA sobre las estructuras empresariales que lideraba, Maciques se mantuvo como una figura relevante dentro del sistema de privilegios que benefició a la cúpula castrista. Abraham Maciques murió el pasado 29 de mayo a la edad de 95 años.