“Por culpa del MINSAP mi hijo perderá el ojito”: madre de Damir responde a difamaciones

MIAMI.- Eliannis Ramírez, madre del niño cubano Damir Ortiz, sostuvo en conferencia de prensa este lunes, en el Museo Americano de la Diáspora Cubana en Miami, Florida, que los médicos en Cuba estaban dejando morir a su hijo.

Durante la comparecencia, Ramírez explicó que, si bien autorizó la realización de la biopsia, el diagnóstico fue equivocado y todo el tratamiento posterior se llevó a cabo bajo presión médica. “Lo estaban dejando morir”, reiteró en la transmisión, subrayando además que los galenos mostrados en la Televisión Cubana no atendieron personalmente a Damir.

La madre describió el delicado estado de salud de su hijo y recordó las negligencias acumuladas desde su nacimiento en la isla. “Yo me manifesté junto a Diasniurka Salcedo Verdecia en 2023, en el Ministerio de Salud Pública, ya cuando Damir tenía 8 años, y tengo que decir que gracias a ella comencé a ver la luz, de toda la verdad y de todo lo mal atendido que estaba mi hijo desde que nació”, manifestó Ramírez, resaltando la relación de largo tiempo con la activista y el compromiso que ella tuvo con la salud del menor.

Sin embargo, según la madre, una vez que comenzó a denunciar públicamente la situación a través de las redes sociales, el régimen desahució a su hijo. Ramírez explicó que Damir será sometido a una operación en el ojo izquierdo, el único por el que aún puede ver, y lamentó profundamente que haya perdido el otro ojo como consecuencia de errores médicos, tratamientos inadecuados y bacterias contraídas en el sistema de salud cubano. “Es culpa del MINSAP que mi hijo tenga que perder el ojito”, afirmó con firmeza frente a los periodistas.

En la conferencia, la madre comparó la atención recibida en el hospital de Miami con la de La Habana, destacando que su hijo ya no presenta las escaras con las que llegó desde Cuba. A pesar de las denuncias, Ramírez agradeció el esfuerzo de algunas enfermeras cubanas que cuidaron a Damir, llegando incluso a mencionar que una de ellas renunció a su trabajo al no soportar las condiciones del hospital.

La mujer también expresó su temor por la seguridad de su otro hijo, que permanece en Cuba, y por la de su propia madre. “Nunca di el consentimiento para que el caso de mi hijo saliera en la Televisión Cubana”, recalcó, denunciando la violación a la privacidad de su familia. “Ninguno de los médicos que salió en la televisión atendió a mi hijo personalmente, ninguno lo examinó, ninguno de ellos le hizo nada”, enfatizó, evidenciando lo que considera una campaña de manipulación por parte del régimen.

Ramírez no dudó en denunciar a la doctora Araiz Consuegra Otero, directora del Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez, a quien responsabilizó por haber culpado a la madre de que Damir llegara a estar en estado crítico en EE.UU. “Ella dijo que yo era la culpable de que mi hijo llegara a estar en condiciones críticas a EE.UU. por no haberle hecho una biopsia”, declaró.

La madre aclaró además que, a pesar de lo difundido en la Televisión Cubana, la biopsia sí se realizó tras el traslado de Damir al Instituto de Neurología y Neurocirugía. “El doctor Orestes, que es el director, sabe que se le realizó la biopsia de la lesión de la cabeza, y también se hizo otro medulograma en el Instituto, por los doctores hematólogos Gustavo y Martiniano, quienes en menos de 24 horas me dieron el falso diagnóstico de que mi hijo tenía una leucemia aguda en cuarta etapa”, denunció enérgicamente.

“Ningún examen, ni siquiera las resonancias, fueron realizados sin presión. Ellos, el sistema de salud pública, tuvieron miles de oportunidades para diagnosticar a mi hijo”, concluyó Ramírez.

El Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) defendió la atención brindada a Damir Ortiz en una comparecencia especial televisiva el pasado viernes, culpando a la madre de interferir en el tratamiento del menor. Los funcionarios aseguraron que todas las decisiones médicas –tomadas por consenso– tuvieron como prioridad el bienestar de Damir, quien fue trasladado a un hospital en Miami tras una intensa campaña en redes sociales.