Mujer es asesinada por su expareja, feminicida confesó y se entregó

La ciudadana Anielka del Carmen Mayorquín Espinoza, de 33 años, fue asesinada en su casa de habitación en el Distrito I de Managua el miércoles, 15 de octubre, a manos de su expareja, identificado como Sergio Antonio Olivares Pérez, quien tras cometer el delito acudió a una delegación policial y confesó lo ocurrido.

Así lo reportaron medios oficialistas y cazadores de noticias en redes sociales.

Según estos relatos, Olivares habría llegado a casa de su expareja a eso de las 6:30 PM con la intención de convencerla de reanudar su relación con él. Estos mismos informes aseguran que Olivares exhibía conducta obsesiva y acosadora en contra de la ahora interfecta.

La víctima falleció de choque hipovolémico al propinarle Olivares 18 estocadas en cuello, tórax y abdomen. Fue una herida en el cuello que cercenó la yugular la que resultó mortal para Mayorquín.

Además, la oficialista Radio Ya presume que Olivares habría abusado sexualmente de la víctima antes de asesinarla.

El hallazgo del cuerpo se realizó cuando la madre de la víctima, Gertrudis Espinoza, al no responder su hija las llamadas, pidió a un vecino que revisase si estaba bien. El padre de la víctima, Juan Mayorquín, estaba cubriendo su puesto como guarda de seguridad en el Instituto Rigoberto López Pérez.

El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para las averiguaciones correspondientes.

Mayorquína trabajaba como contadora al servicio de la Federación de Atletismo en el Instituto Nicaragüense de Deportes.