Exvocero del régimen quiere residencia en Estados Unidos

MADRID, España.- Bruce Iam González Marrero, exdirigente del Movimiento Juvenil Martiano en Santa Clara y antiguo profesor universitario vinculado al oficialismo cubano, intenta rehacer su vida en Estados Unidos mientras enfrenta denuncias por su pasado como propagandista del régimen castrista.

Tras ingresar al país por la frontera y solicitar asilo, confirmó Martí Noticias, González Marrero, de 28 años, reside actualmente en el estado de Kentucky y aguarda por la residencia permanente bajo la Ley de Ajuste Cubano.

Su caso ha despertado polémica entre activistas y miembros del exilio cubano, quienes denuncian que González formó parte de la maquinaria ideológica del castrismo y fue responsable de discursos de odio dirigidos contra opositores, periodistas y defensores de derechos humanos. A través de sus redes sociales, que posteriormente eliminó al llegar a EE.UU., difundía mensajes de corte homofóbico, agresivo y alineados con la narrativa oficial del régimen.

La plataforma independiente RepresoresCubanos.com lo describe como “militante de la Unión de Jóvenes Comunistas UJC) y ciberclaria (troll al servicio del régimen cubano)”.

Capturas de pantalla conservadas por activistas documentan publicaciones en las que González insultaba a exiliados, llamaba “ratas” a los manifestantes del 11J y se refería con desprecio a la ciudadanía estadounidense, a la que calificó de “gallinas americanas” apenas dos meses antes de abandonar la Isla.

El exdirigente juvenil, cuya imagen fue difundida en su momento por cuentas institucionales, ahora intenta desligarse de su pasado borrando toda huella en redes sociales. Sin embargo, varios expertos en migración advierten que su rol como miembro activo de una organización comunista podría ser motivo suficiente para que le sea denegado el estatus de residente permanente.

El caso de Bruce Iam se suma al de numerosos exfuncionarios del régimen que intentan acogerse a beneficios migratorios. La situación ha llevado a legisladores cubanoamericanos a exigir mayor rigor en los procesos migratorios para evitar que quienes fueron cómplices de la represión obtengan protección en territorio estadounidense.