Medios y organizaciones beneficiadas. Entre las entidades que han recuperado financiamiento se encuentran:
CubaNet, con sede en Miami, cuya subvención de 1.8 millones de dólares de USAID ha sido restablecida, aunque su contrato sigue en revisión.
Cubalex, organización que brinda asistencia legal a disidentes, obtuvo la aprobación para un proyecto previamente suspendido, aunque perdió otras subvenciones.
El Toque, medio independiente, fue notificado sobre el desembolso de fondos, aunque sin detalles sobre programas suspendidos.
Outreach AID to the Americas, que apoya iglesias en Cuba, también podrá continuar con parte de sus programas.
Recortes y cierres. A pesar de estas reactivaciones, la política de recortes impulsada por la administración de Donald Trump ha reducido drásticamente el financiamiento a programas de USAID, impactando al 83% de sus iniciativas. Esto ha afectado a organizaciones como el Instituto Republicano Internacional y el Instituto Nacional Demócrata, que han perdido la mayoría de sus proyectos.
Uno de los cierres más significativos fue el de Radio y TV Martí, que dejó de transmitir por primera vez en 40 años, lo que generó gran preocupación en la comunidad del exilio cubano.
Incertidumbre sobre el futuro. El destino de estos programas sigue siendo incierto, pues la estrategia del gobierno estadounidense respecto a Cuba no está clara. La Fundación Nacional para la Democracia, que gestiona parte de los fondos, ha liberado algunos recursos, pero el futuro de organizaciones que dependían de su financiamiento sigue en duda.
Mientras algunas iniciativas recuperan respaldo, otras esenciales han sido eliminadas, lo que refleja un panorama incierto en la política de EE.UU. hacia Cuba y el apoyo a la libertad de prensa y derechos humanos en la isla.