
A tres años del incendio en Matanzas: quedan las preguntas y el dolor
- Cuba
- agosto 5, 2025
- No Comment
- 4
El mayor desastre industrial en la historia de Cuba dejó 17 bomberos muertos, entre ellos jóvenes reclutas del Servicio Militar Activo (SMA).
MIAMI, Estados Unidos. – Este martes se cumplen tres años del trágico incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas, un siniestro que desató un profundo debate social sobre la responsabilidad del Estado, la preparación de las fuerzas de respuesta y el uso de soldados del Servicio Militar Activo (SMA) para tareas de alto riesgo.
El incendio comenzó el 5 de agosto de 2022 tras ―según la versión oficial― el impacto de un rayo sobre el tanque 52 de almacenamiento de crudo, lo que provocó una serie de explosiones en cadena que consumieron cuatro de los ocho depósitos de combustible de la instalación.
La tragedia terminó con un saldo de 17 bomberos fallecidos ―varios cadáveres, totalmente calcinados, ni siquiera pudieron ser identificados― y al menos 146 lesionados.
“Aquí no va a pasar nada”
Uno de los momentos más polémicos del manejo del siniestro fue revelado por un video que circuló en agosto de 2022 y en el que se ve a un jefe militar ordenando a sus subordinados acercarse al área del incendio justo después de una explosión.
“Acérquense aquí. Hagan silencio y escúchenme bien un momento: Aquí no va a pasar ni pinga… Nosotros vamos a salir bien, vamos a salir calmados”, grita el oficial, identificado presuntamente como el teniente coronel Chirino, a apenas 350 metros de los tanques aún en llamas. Ante el miedo de los bomberos, el militar insistió: “Eso es combustible, acaba de terminar de explotar el tanque. Por supuesto que tenemos que sentir calor… ¿Cuál es el problema?”.
El video causó indignación en redes sociales, especialmente cuando se supo que varios de los bomberos fallecidos eran jóvenes reclutas del Servicio Militar Activo, sin experiencia previa en este tipo de emergencias.
Condena de expertos internacionales
Un informe publicado por EFE el 8 de octubre de 2022, que cita a expertos en incendios de España, México y Rusia, cuestionó la estrategia empleada por las autoridades cubanas. El bombero español Joaquín Marfil calificó como “una locura acercar personal” a los tanques en llamas. Un especialista de la empresa petrolera mexicana Pemex fue tajante: “Veinte metros es una imprudencia, en especial con un tanque de esas dimensiones”.
Los analistas coincidieron en que lo adecuado habría sido dar por perdido el primer tanque y trabajar sobre los siguientes “a distancia con maquinaria como cañones de agua con servocontrol”. Otro experto de Pemex cuestionó el uso de personal inexperto: “Si no tienes los materiales y no puedes evitar que se propague el fuego, ¿cuál es el punto de arriesgar a tu personal?”.
Además, el especialista ruso Alexandr Gofstein, exjefe del Centro de Preparación de Rescatistas de su país, apuntó a defectos estructurales en la base: “Debe respetarse cierta distancia entre tanques y crear vías de acceso para emergencias como esta”, declaró.
#NoAlServicioMilitar: una campaña que no se apaga
Tras confirmarse que varios de los fallecidos eran adolescentes que cumplían con el Servicio Militar Activo (de carácter obligatorio para los varones), estalló una campaña en redes sociales bajo las etiquetas #NoAlServicioMilitarObligatorio.
Un año después del desastre, CubaNet constató que las víctimas y sus familias seguían sin recibir reparación alguna. Tampoco se había hecho pública ninguna investigación oficial sobre responsabilidades en la cadena de decisiones que llevó a colocar a jóvenes inexpertos en la primera línea del fuego.
Hasta ahora, el régimen cubano ha mantenido la versión inicial del incidente: que una descarga eléctrica fue la causa del desastre, y que el sistema de pararrayos no resistió la energía del rayo. La explicación no convenció a muchos expertos, que señalaron fallas de mantenimiento, diseño y respuesta.
El 3 de septiembre de 2022, el Gobierno cubano condecoró póstumamente a seis de los bomberos fallecidos con la “Orden 6 de Junio de Segundo Grado”. Entre ellos estaban el primer suboficial Diosdel Nazco, Luis Ángel Álvarez, Pablo Ángel López, y los soldados Leo Alejandro Doval, Adriano Rodríguez y Fabián Naranjo.
Más allá de la tragedia humana, el incendio agravó una ya precaria situación energética en Cuba. La Base de Supertanqueros de Matanzas, la más importante del país, perdió cuatro tanques de 50.000 metros cúbicos cada uno. La escasez de combustible obligó al Gobierno a aumentar importaciones desde Venezuela, Rusia y otros países.
El fuego fue declarado extinguido el 12 de agosto de 2022, siete días después de su inicio, tras la llegada de equipos y bomberos de México, Venezuela, Rusia, Nicaragua, Argentina, Chile y China.
Sin embargo, las llamas dejaron más que cenizas. A tres años del incendio, el país continúa sin respuestas claras, sin reparación para las familias de los fallecidos, y sin garantías de que una tragedia como esta no vuelva a ocurrir.
Sigue nuestro canal de WhatsApp. Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de Telegram.