
La gira nacional de “malas compañías” de Daniel Quintero
- Colombia
- octubre 15, 2025
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A Daniel Quintero le gusta, como al presidente Gustavo Petro, crear narrativas y juegos de palabras que digan todo y nada, como “resetear”.
El exalcalde de Medellín, que compite para la consulta del Pacto Histórico el próximo 26 de octubre, dice que va a “resetear” la política tradicional, al Congreso y a los medios —al punto de amenazar entre risas con expropiaciones (ver recuadro)—. Pero lo que está haciendo es “resetear” la maquinaria política, no para enderezarla, sino para ponerla a su favor: Quintero acude, precisamente, a las prácticas de toda la vida.
No solo lo dicen sus opositores, e incluso copartidarios, sino que se ve por las “malas compañías” que está mostrando en su paso por ciudades y regiones del país. El exsenador Gustavo Bolívar, que lo ha criticado públicamente, lo dice sin matices: “Nos empiezan a llegar informes que está haciendo alianzas por todo el país con partidos que no son del Pacto Histórico, entonces dijimos ‘aquí esto se dañó’ (…) aparecen las casas políticas apoyando a esta persona, no sabemos a cambio de qué, cuál será el acuerdo”.
El acuerdo es llegar al poder y parece que no importa con quién. La estrategia de Quintero, según fuentes del petrismo, intenta combinar voto de opinión con apoyo en estructuras regionales ya consolidadas, incluso si están bajo la lupa judicial. A eso se suma, como es costumbre en él, un show mediático que está alimentado por la idea de que “votar por Petro es votar por Quintero” y así, mal que bien, se ha ganado el apoyo de directivos de esa colectividad y de varios congresistas (ver nota anexa).
Pero lo que dice el propio Bolívar es que la estrategia también pasa por el dinero. “Es que líderes que me han acompañado hace varios años, que yo consideraba que eran muy firmes, de repente dejan de contestarme el teléfono y después aparecen en las redes sociales apoyando a Quintero. Eso no es gratis, hay mucha plata porque son líderes que también necesitan plata para funcionar y nosotros nunca les damos, porque no hacemos ese tipo de política”, dijo hace unas semanas el exdirector del DPS.
En Palacio dicen que “el corazón del señor presidente está con Cepeda, pero la mente con Quintero” e incluso señalan que figuras como el ministro Armando Benedetti ya dan por descontado que Quintero va a ganar la consulta de octubre y que el Gobierno se debate entre apoyarlo a él o al exembajador Roy Barreras. Ambos, en cualquier caso, alejados de las bases del petrismo “pura sangre”, que como Bolívar se sienten traicionadas.
Esposa del alcalde imputado
Su más reciente aparición pública fue este puente festivo en Barrancabermeja. La aspirante al Senado por el Pacto Histórico, Laura Ahumada, organizó un evento masivo con tarima, plaza llena y miles de asistentes —según la campaña, cerca de 10.000 personas— para impulsar al exalcalde de Medellín.
Ahumada es esposa del actual alcalde de Barrancabermeja, Jonathan Vásquez, quien fue imputado por la Fiscalía por presunta compra de votos. Según el escrito de acusación, su campaña habría pagado 100.000 pesos por sufragio, un señalamiento que él niega pero que mantiene abierto un proceso judicial.
El vínculo no es nuevo: Vásquez fue apoyado políticamente por Quintero cuando aspiró a la Alcaldía por firmas. Hoy, esa relación se consolida en una región en la que Quintero pretende sacarle ventaja a Cepeda y Corcho con estructura política y burocrática.
De hecho, la candidatura de Ahumada dentro del Pacto ha generado resistencia desde el propio progresismo. La exministra Susana Muhamad advirtió sobre el costo reputacional de permitir alianzas con liderazgos cercanos a estructuras investigadas, y el Comité de Ética llegó a proponer un veto que no prosperó.
“Quiero darle las gracias a una mujer valiente, berraca, inteligente, y que va a ser nuestra próxima senadora”, dijo ante la multitud alzando la mano de Ahumada, quien le respondió: “Después de la P de Petro, viene la Q de Quintero”.
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En la tarima también estuvieron Andrés Parra, candidato a la Cámara cercano a la senadora Gloria Flórez, y Carlos Sotomonte, líder ambientalista que apoyó a fallecido Rodolfo Hernández.
La representante a la Cámara, Jennifer Pedraza, dijo sobre ese evento que “antes de ‘celebrar’ esta foto de Quintero llenando una plaza, busque en Google quién es el impresentable alcalde de Barranca (…) Gustavo Petro lo sabe y aún así lo respalda”.
La gira paisa
En su propia tierra, el exalcalde está montando una gira por municipios del Occidente del departamento este viernes 17 de octubre.
“Nadie les quiere ir, les están dando dinero y alimentación. El encargado es el alcalde de Santa Fe de Antioquia”, le dijo a este diario una fuente enterada. El mandatario Yamid Carvajal, del Partido Liberal, no contestó las llamadas para preguntarle por esta presunta participación en política.
En el arcoíris de partidos que Quintero tiene montado en Antioquia están líderes cuestionados como el excongresista Julián Bedoya y el senador Álex Flórez. También están Alejandro Toro y el diputado Walter Salas.
Pulgar en Barranquilla
La próxima semana Quintero tiene otro “tarimazo”, pero en Barranquilla y según varias denuncias en redes sociales lo estaría apoyando el exsenador Eduardo Pulgar, quien fue condenado por intentar sobornar a un juez de la República.
Todo el poder de ese cacique electoral estaría dispuesto para llenar un auditorio de más de 3.000 personas. El periodista local Roberto Tico Rosanía dijo en sus redes que “toda la artillería logística y política del exsenador Pulgar, en cabeza de la alcaldesa de Soledad, Alcira Sandoval, está obligada a meterle un ejército de personas al auditorio de Combarranquilla de la Calle 30”.
En el Atlántico, Quintero también cuenta con el respaldo de otras “malas compañías”: Pedro Flórez, integrante del poderoso clan Torres, liderado por el empresario Euclides Torres que se ha beneficiado con millonarios contratos y que es recordado, entre otras, por financiar el evento de la ‘P’ de Petro en Barranquilla en 2022.
Más apoyos cuestionables
En Pasto, según reveló La Silla Vacía, Quintero cuenta con la estructura de Anderson Martínez, concejal que proviene de una administración respaldada por Partido de la U y Cambio Radical. Martínez no es considerado un dirigente del corazón del Pacto.
En Valle del Cauca, que es un territorio clave para el petrismo, tiene aún más apoyos: Alejandro Ocampo, representante a la Cámara, y Deninson Mendoza, exgerente de Telemedellín.
A ellos se suman figuras cercanas al grupo político del exalcalde Jorge Iván Ospina, como Julián Zapata y Oscar Villani, quien también busca cupo en la consulta del Pacto y suma sectores del Partido Alianza Verde.
También ese portal contó que Gloria Arizabaleta, representante de La Fuerza de la Paz y exesposa de Roy Barreras, estaría apoyando a Quintero junto a Carlos Eduardo Arizabaleta , quien participa en la consulta a la Cámara. Otro apoyo relevante es la estructura política de Nancy Castillo, exrepresentante liberal que ahora busca un lugar en el Pacto.
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Cómo será de variopinta el apoyo a Quintero que entre sus filas hay exfuncionarios de Claudia López como Alejandro Rivera, quien lideró en esa alcaldía proyectos con los vendedores ambulantes y que ahora también quiere un cupo como representante a la Cámara por Bogotá.
En la capital, aunque el exalcalde habla mal de Parkway (barrio de Bogotá) porque ahí viven, según él, los “soviets de la izquierda”, tiene empapelada varias paredes y postes, también en Chapinero y el Centro.
Para el profesor de la U. Javeriana, Humberto Librado, Quintero busca ese “tipo de apoyos en estructuras políticas que no tiene con la cúpula del Pacto”. El experto dice que “los escándalos de su hermano se suman a la larga cadena de escándalos que parecen darle tema para mostrarse como un perseguido por la política tradicional (…) en otras regiones puede seguir mostrando un discurso más radical que el de los otros candidatos del petrismo”.
De hecho, fuentes del Pacto Histórico consideran que Quintero “es un sapo que nos debemos tragar”. Están convencidos, como él, que hay que “resetear”, pero quizá al estilo de El Gatopardo: “Cambiar todo para que todo siga igual”.
Quintero amenazó con expropiar a EL COLOMBIANO
Al día siguiente de conocerse nuevas revelaciones de presunta corrupción sobre su hermano y “amiguitos”, el exalcalde Daniel Quintero hizo una gira de medios en Bogotá en programas de radio de la mañana.
En La FM de RCN, al ser cuestionado sobre si siendo presidente cerraría medios de comunicación, así como promete cerrar el Congreso, Quintero dijo entre risas: “A EL COLOMBIANO lo voy a expropiar (…) Lo estoy diciendo de forma jocosa. No, la verdad es que EL COLOMBIANO es un medio que fue comprado por los dueños de Hidroituango y lo convirtieron en un arma política”.
Otra mentira del candidato. Los “dueños” de Hidroituango son EPM y la Gobernación de Antioquia; es más: Quintero quería a toda costa acabar con el contrato de construcción para entregárselo a unos “empresarios chinos y gestionar la “comisión” correspondiente.
Este diario lo seguirá investigando, como debe hacer el periodismo con todos los candidatos, solo que a unos les incomoda más que otros por aquello de las ínfulas de dictador.