Luisito comunica sus impresiones, pero evita la palabra «represión» 

Luisito comunica sus impresiones, pero evita la palabra «represión» 

  • Cuba
  • mayo 1, 2025
  • No Comment
  • 8

LA HABANA, Cuba. – El mismo día que Luisito Comunica subió sus impresiones sobre Cuba a YouTube, también fue el momento escogido por el régimen para subir —mediante Humberto López— las suyas sobre la revocación de la libertad condicional a José Daniel Ferrer y Félix Navarro. Es una casual coincidencia, sin dudas, pero es de esas que, por la ironía y la perversidad que encierran, terminan siendo el mejor ejemplo de una realidad que pocos se atreven a llamar por su nombre, a pesar de que nos lo dice a gritos.

Por un lado, el youtuber-turista que, aun chocando con el desastre de sociedad que ha visitado, aun percibiendo el “trauma” que encierran las respuestas y reacciones de muchos de sus entrevistados, no concluye que pudo filmar y hacer preguntas en las calles porque sencillamente se lo permitieron (no así a otros como él, aunque más “problemáticos” y también menos famosos y, por tanto, más “reprimibles”); y por el otro, una funcionaria y un vocero del régimen que dejan bien claro que los dos opositores han sido devueltos a prisión sobre todo por sus publicaciones en redes sociales, en tanto el silencio, más que la obediencia, ha sido una de las condiciones para esa “no-libertad” pactada con el Vaticano. 

Es decir, el día que publica su reportaje aquel al que le han permitido venir y filmar “libremente”, ha sido el momento para encerrar a aquellos dos a los que han prohibido expresarse en libertad, y es por eso que veo en la “coincidencia” una ironía, por no decir una cabronada. Una de esas que a partir de ahora debiera tener en cuenta Luisito cuando suba sus otras “impresiones” del viaje a Cuba, y también de las que pudieran ayudarle a pronunciar la palabra que tanto evitó: “represión”. No porque no la hayan usado contra él no quiere decir que no la tuvo enfrente, y quizás hasta alrededor, porque obviamente alguien como él, con su poder de influencia, estuvo todo el tiempo “monitoreado”. 

No obstante, echando a un lado las guarachitas de fondo al estilo Buena Vista Social Club, los paseos en almendrón, la desinformación que lastra sus apreciaciones y conclusiones (más en cuanto a la “seguridad en las calles”), la voluntad que se intuye en el trasfondo por promocionar un destino de sol, playa, tabaco y ron, el reportaje de Luisito Comunica ha sido demoledor, más cuando no es exactamente lo que la dictadura esperaba, como tampoco es la loa que muchos pensamos que sería al verlo trabajar sin contratiempos (algo raro, y sospechoso). 

Al final, ha sido el típico reportaje lleno de asombros, de espantos y encantos, la visión express del extranjero que se llega a Cuba unos días pero que, al ser publicada por alguien como Luisito, acapara la atención de multitudes, logrando casi 4 millones de vistas en 24 horas. Eso, a pesar del contenido turístico-promocional, es de agradecer cuando además no ignora nuestra catástrofe, pero también es algo que en los últimos tiempos es bien difícil de ignorar, incluso por los incondicionales al régimen, de modo que los agradecimientos le llegan más por parte de la dictadura.

Porque en medio de la crisis que la asfixia, con indicadores muy negativos en el turismo, cualquier promoción “gratis” le viene como anillo al dedo, y después del video de Luisito, que se ha cuidado mucho de hablar de represión (quizás no porque se lo hayan pedido sino porque en lo personal no le interesa, como no le interesó comprar un apartamento en Venezuela, por barato, cuando los venezolanos huían del chavismo), algún que otro loco, algún que otro nostálgico, masoquista, perverso o subnormal se le ocurra por embullo viajar a Cuba. Y las palabras usadas por Luisito son lo suficientemente “sugerentes” para imaginar, desde la democracia, una “aventura castrista”.     

Luisito le llama “surrealista”, “contrastante”, “absurda” y “anacrónica” a nuestra realidad pero, a pesar de que las pruebas de lo que es verdaderamente están a la vista, tanto en las calles como en la gente, opta por evitar la palabra que con más exactitud la define, y esa es la represión, expresándose a plenitud en miserias, destrucciones, abandonos, abusos, escasez, rostros pixelados por temor a hablar, respuestas a medias, resignación, conformismo y además “bloqueo”, sí, porque este no llegó como “casual coincidencia” sino como consecuencia de las acciones de un régimen represivo, violento, expropiador, pero sobre todo que no dudó en apuntar con misiles nucleares a su vecino cuando soñó que, bajo el pretexto de una acción defensiva, podía extender su “revolución comunista” hasta Washington con la ayuda ofensiva de Moscú.

No puede haber un retrato fiel y completo de la realidad cubana si el fotógrafo evita no solo exponer la represión en el encuadre sino, además, colocarla en el centro de cada una de sus imágenes. Porque todo cuanto ve y registra, aun aquellas cosas que le  pudieran parecer “encantadoras” en una dictadura, lo son porque disimulan que no encarnan ese componente abusivo esencial de todo régimen represivo.

Así, por poner solo un ejemplo, la parte más “bella” de La Habana Vieja lo es porque otras zonas de la ciudad han sido sacrificadas para su “conservación”, porque cientos de familias han sido desplazadas y confinadas en albergues durante años para alzar hoteles sobre las ruinas de sus antiguos hogares, porque por cada edificio que se derrumba, por cada persona que muere aplastada por los escombros, los militares suman una nueva parcela que ofrecer en su “cartera de oportunidades para la inversión extranjera”. 

Retornando a la coincidencia sobre la que llamé la atención al inicio, por cada influencer extranjero que llega y publica sus “impresiones” (con la sospechosa tolerancia del régimen), hay más de un periodista independiente y un opositor que son obligados al silencio, que son castigados por la desobediencia. De modo que es un error pensar que en Cuba “todo es sumamente complicado” porque es un “país atrapado en el pasado” o porque “la autoridad te deja soñar pero no tan en grande”. Cuba es un país atrapado en las garras de un régimen represivo, y cuando uno entiende ese “detalle”, el de la represión, entonces comienza a encontrarle sentido a todo cuanto parece que no lo tiene.

Related post

A

Please enable cookies. Sorry, you have been blocked You are unable to access diariodecuba.com Why have I been blocked? This website…
¿Sí o no? Estas son las preguntas con las que Petro quiere cambiar el trabajo en Colombia

¿Sí o no? Estas son las preguntas con las…

Estas son las preguntas que fueron leídas por el Presidente durante su intervención y que conforman el texto definitivo de la…
ELN anunció un nuevo paro armado de 72 horas en el Chocó

ELN anunció un nuevo paro armado de 72 horas…

El paro armado sobre el río Baudó y sus afluentes iniciará este viernes 2 y se extenderá hasta el próximo lunes,…