“Plan pistola”: Clan del Golfo les estaría haciendo seguimiento a policías y militares en Antioquia para asesinarlos

29 de abril de 2025

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Durante varios días, el Clan del Golfo habría estado siguiendo de cerca a policías y militares para ubicarlos en sus sitios habituales, cuando se encontraban tranquilos y desarmados. Una vez identificados, los atacaron mediante sicarios para asesinarlos. Bajo esta modalidad fueron asesinados dos policías y un militar, y otro uniformado resultó herido. Estos hechos demuestran que la ofensiva del grupo ilegal no se limita a un “Plan pistola” dirigido únicamente contra agentes en servicio activo.

La muerte más reciente bajo esta modalidad ocurrió el pasado sábado en el corregimiento Currulao, de Turbo, Urabá antioqueño, cuando hombres armados llegaron hasta una tienda y allí, cuando departía con sus amigos, dispararon contra el soldado Náfer Rentería Viloria.

Haciendo uso de modalidades similares ocurrieron los asesinatos del subintendente Deímer Díaz Pérez, en unos billares de Carepa el 15 de abril; y cuatro días más tarde ocurrió el crimen del patrullero Jorge Luis García Meza en Chigorodó, después de ir a cumplir un compromiso. Además, en Puerto Berrío, el 22 de abril se presentó un intento de asesinato contra un policía en su vivienda, este logró defenderse y resultó herido.

El comandante de la Cuarta Brigada del Ejército, general Carlos Eduardo Caycedo, expresó que “la inteligencia nuestra ha determinado que los criminales también cambian su modus operandi. Si bien van a continuar adelantando el ‘Plan pistola’, también optan por otras medidas y lo que vemos nosotros y lo que estamos haciendo es contrarrestando para evitar que estas estructuras logren su cometido que es afectar a nuestra fuerza pública”.

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Esta situación se estaría dando bajo el argumento de que muchos de estos uniformados son conocidos en sus comunidades y aprovechándose de esa situación los estarían ubicando para atacarlos.

“Muchos de estos criminales se camuflan dentro de la población civil y aprovechando estas situaciones están llegando a los uniformados cuando están de civil y los atacan”, explicó el secretario de Seguridad de Antioquia, general (r) Luis Eduardo Martínez.

Debido al riesgo al que se ven expuestos los militares, más allá de que no lleven su uniforme, desde la Cuarta Brigada tomaron la decisión de un acuartelamiento de primer grado para las tropas, suspendiendo las licencias, a menos que estas sean urgentes. A los uniformados, para su descanso, los están hospedando en los espacios adecuados, todo con el fin de evitar que en alguna salida queden a merced de los criminales.

El comandante de la Policía Antioquia, coronel Óscar Mauricio Rico, señaló por su parte que se están tomando medidas preventivas y administrativas, sin entregar detalles, para que más allá del “Plan pistola”, no se presenten estos ataques mediante seguimientos.

Pero pese a todos los esfuerzos, la violencia del Clan del Golfo contra la fuerza pública no para. Ayer ocurrieron dos hechos en Salgar y Entrerríos, con un policía muerto y otro más lesionado.

El caso fatal ocurrió en el corregimiento Peñalisa, de Salgar, cuando miembros del Clan del Golfo con fusiles dispararon contra dos uniformados de la Seccional de Tránsito y Transporte, asesinando al patrullero Rubén Darío Velásquez Guevara, de 40 años, y dejando lesionado al patrullero Willian Orlando Ortiz Ovalle, quien fue trasladado a un centro asistencial de Medellín con lesiones de consideración.

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Este se sumó al caso de Entrerríos, donde unidades del Ejército fueron atacadas con un artefacto explosivo, el cual no logró afectarlos drásticamente, según el general Caycedo, por su pronta reacción.

Esta ofensiva del Clan del Golfo, que en Antioquia cobró la vida de ocho personas, cinco policías, dos militares y un civil, además de dejar a 32 personas lesionadas, ha sido contrarrestada con algunas capturas por parte de la fuerza pública, como las ocurridas en El Bagre con una persona que tenía una granada, o en el Urabá con un hombre que estaría implicado en el crimen de uno de los uniformados en medio de esta oleada violenta.

El coronel Rico reiteró que, además, se están ofreciendo hasta $200 millones por quien dé información sobre los responsables de estos hechos y de $20 millones por quien informe sobre posibles ataques contra miembros de este grupo criminal.

Las autoridades tienen claro que no están dispuestas a bajar la guardia y por ello también están realizando múltiples operativos para golpear las finanzas criminales, principalmente la minería ilegal y el microtráfico, que según el secretario de Seguridad de Antioquia, es el principal combustible y el objetivo de este grupo criminal.