
Congresista Carlos Giménez exige deportación de agentes del régimen cubano en EE.UU.
- Cuba
- marzo 20, 2025
- No Comment
- 5
MIAMI, Estados Unidos.– El congresista cubanoamericano Carlos Giménez envió este miércoles una carta a la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), Kristi Noem, en la que manifiesta su profunda preocupación por la presencia en Estados Unidos de agentes del régimen cubano y del Partido Comunista de Cuba (PCC).
En la misiva, Giménez insta al DHS a identificar, deportar y repatriar a estos individuos que “representan una amenaza directa” a la seguridad nacional de Estados Unidos, a la integridad del sistema migratorio y a “la seguridad tanto de los exiliados cubanos como de los ciudadanos estadounidenses”.
El congresista también denunció que ciertos individuos con vínculos directos con el PCC y la Seguridad del Estado del régimen cubano han explotado con éxito el sistema migratorio estadounidense, obteniendo entrada bajo falsas pretensiones. Giménez calificó esta situación como “una afrenta” a los principios de Estados Unidos y “un insulto directo a los numerosos exiliados cubanos que han buscado la libertad en Estados Unidos”.
Asimismo, el único representante del país norteamericano nacido en la Isla subrayó: “La presencia de estos operativos del régimen no solo pone en peligro a nuestras comunidades, sino que también proporciona una plataforma para que la dictadura cubana participe en espionaje, coerción política y actividades ilícitas dentro de nuestras fronteras”.
Giménez exhortó al DHS a tomar medidas inmediatas y decisivas, específicamente solicitó “investigar e identificar a individuos con vínculos con el Partido Comunista de Cuba y el régimen castrista que han ingresado a EE.UU. mediante pretensiones fraudulentas”, “hacer cumplir las leyes migratorias vigentes para deportar a quienes estén en violación”, y “fortalecer medidas de control para prevenir futuros abusos del sistema migratorio por individuos afiliados a regímenes extranjeros hostiles”.
La carta concluye afirmando que Estados Unidos debe seguir siendo “un faro de esperanza y libertad para quienes escapan de la tiranía, y no un refugio seguro para aquellos que han sido cómplices de perpetuarla”.